En cuestión de horas, otras 16 familias entregaron la documentación y se beneficiarán. Ya van 524 hogares que saldrán de la ocupación indebida, en zona de alto riesgo y con problemas de salubridad a lugares dignos, seguros y de su propiedad.
Las noticias cada día son más positivas en Caracolí, ocupación indebida ubicada en la localidad de Ciudad Bolívar. En las últimas horas, otras 16 familias entregaron documentos y salieron viabilizadas para convertirse en nuevos beneficiarios de la Alcaldía de Bogotá. Es decir, por ahora 524 hogares serán reubicados exitosamente.
Así lo informó el director de la Caja de la Vivienda Popular, Lino Roberto Pombo, quien destacó que la cifra de beneficiarios podrá aumentar en las próximas horas.
“Estamos a tiempo, las familias que no han entregado documentos pueden hacerlo. Nuestros funcionarios de la CVP están dispuestos a recibirles la documentación y a examinar su viabilidad de forma urgente”, expresó el funcionario, quien precisó que el tiempo se está agotando y el único objetivo del Distrito es salvaguardar la vida de estas familias y asegurarles su bienestar.
Por eso, se les sigue ofreciendo como alternativa un instrumento financiero de 58 millones de pesos para que escojan vivienda en Bogotá o cualquier lugar del país. Además, se les da la opción de escoger apartamento en Arboleda Santa Teresita, en San Cristóbal, una vivienda en Ciudadela Porvenir Manzana 52, en Bosa Porvenir
A la fecha 261 familias que vivían en Caracolí ya entregaron sus predios a la Alcaldía de Bogotá y 301 aceptaron el beneficio de la relocalización transitoria (pago de un arriendo temporal por parte de la entidad), mientras escogen la vivienda donde residirán el resto de sus vidas.
“Estas familias viven en arriendo temporal y nosotros como Caja de la Vivienda Popular los acompañamos en el proceso de escogencia de su nuevo hogar, bien sea el que les ofrecemos como Distrito o el que quieran adquirir dentro o fuera de Bogotá con los 70 salarios mínimos legales mensuales vigentes”, informó Pombo.
La Alcaldía de Bogotá optó por reubicar a estas familias asentadas indebidamente en Caracolí, porque la zona no es apta para la habitabilidad de los ciudadanos. La pendiente, donde se instalaron las viviendas de tabla y zinc, fue declarada zona de alto riesgo de remoción en masa, hay problemas de insalubridad, hacinamiento y otras dificultades para la ciudadanía.