Bogotá, Julio 6 de 2018 (CVP).- Yeimi Paola Rodríguez cuenta que el mejoramiento de vivienda que le adelantó la CVP en su casa le transformó su forma de vida.
Su casa le apenaba. No le gustaba mostrarla, lucirla; menos, exhibirla en fotos. Sin embargo, la realidad cambió cuando Yeimi Paola Rodríguez, de 34 años, se enteró que la Caja de la Vivienda Popular estaba mejorando las condiciones de vida de los capitalinos.
Buscó a funcionarios de la CVP, llenó los formularios y en menos de una semana le entregaron la noticia: ella era una de las beneficiarias del programa de Mejoramiento de Vivienda que ofrece la entidad.
De inmediato, su casa ubicada en el barrio Tibabuyes, en la localidad de Suba, empezó a transformarse. Los pisos de su sala, cuartos y cocina cambiaron totalmente del cemento a una baldosa donde la familia Rodríguez ahora podrá caminar descalza y hasta realizar fiestas sin asomo de vergüenza.
La cocina se adornó con un mesón nuevo. Los cuartos tuvieron más luz, nuevas ventanas y desde luego mayor claridad. Los contratistas de la CVP le pintaron las paredes de colores claros.
“Estoy demasiado agradecida. Mi presupuesto, siendo realistas, no hubiera alcanzado para remodelar mi casa”, describe Yeimi Paola Rodríguez, mientras señala su lavadero, también edificado por la entidad.
“Al alcalde de Bogotá Enrique Peñalosa no tengo cómo agradecerle por pensar en nosotros, las familias más desprotegidas de Suba… hoy me sobran palabras para agradecer y para decirle a todos los capitalinos que el Distrito cumple, que a mí la Caja de la Vivienda Popular me cumplió y a ustedes también”, concluyó esta mujer.